Borges decía de la Pampa que era el único lugar del mundo donde Dios podía ir como gusta...".
Ciertamente el autor del imaginaria "biografia de Taedo Isodoro Cruz" (Companero del igualmente imaginario "Martin Fierro" de José Hernàndez), nunca había visto los llanuras de Siberia a pesar de sus numerosos viajes. Pero es cierto que en esta inmensidad desesperadamente plana, nulo obstáculo viene a elevarse entre el ojo y el horizonte.
A la excepción quizá de las hileras de eucaliptos que bordean las largas líneas derechas de las rutas que recorren este "océano de hierbas".
A excepción de los innumerables eolicos que sacan el agua necesaria para los caballos criollos o para las manadas de "holanda-argentina", especie más difundida de vacas importada de Holanda y Suiza. 
A la excepción también de los postes telefónicos sobre los cuales vienen a encaramarse un momento los "caranchos" (rapaz) en búsqueda de presa, o los "horneros" que cogeron la costumbre de construir sus nidos hechos de lodo sobre los hilos. 
No, no están tampoco los algunos pueblos sin campanarios, cuyos nombres traicionan el origen de su fundador, que podrían cortar las ráfagas del "Pampero" o de la"Sudestada" sobre la llanura. El aire es vivo en invierno, puro en verano a pesar de la cubierta de calor que abruma hombres y animales cuando los vientos han terminado de soplar. 
Una luz clara, límpida, y contrastada inunda este lugar de melancolía donde solos seres que se satisfacen de poco, pueden sobrevivir de tiempo que pasa, lentamente, invariablemente, idéntica a cada hora, cada día, cada estación que pasa: los llamamos los "gauchos".- Observacion : Fotografías sacadas en las tierras de la estancia La Figura
1 comentario:
Qué bello es este blog!!!!!!!!
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